Un día decidí ser el capitán de un barco.
Entonces empecé la búsqueda de una embarcación digna de un capitán como yo. Fui a varias barquerías a preguntar, pero todos los vendedores se burlaban de mí ante la idea de que alguien de mi tamaño y edad pudiese ser capitán. Pero un viejo pirata que escuchaba creyó en mí y me regaló su mejor barco.
Así fue como me convertí en un capitán y navegué por los mares y océanos hasta el horizonte, justo donde el agua y el cielo se tocan. Entonces navegué por los cielos, entre nubes de todas formas, colores y tamaños, incluso entre esas bonitas que parecen malvaviscos y que rodean al Sol cuando éste desaparece. Entonces seguí al Sol hasta que se metió a la tierra y descendí con él.
Y ese fue el día en que me convertí en capitán de un barco.
Fin
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1 comentarios:
Cuenta como te volviste lobita-dinotauria-pescadora.
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